Les pasa a muchos tutores de perras: la mascota presenta signos de estar preñada, pero en realidad nunca se apareó con un macho. ¿Qué es lo que sucede? ¿Se trata de una enfermedad? ¿Corre algún riesgo? ¿O quizás es un fenómeno natural que nosotros confundimos con un problema?
Vamos por partes. En primer lugar, el término “psicológico” puede dar lugar a confusión. El animal no cree que está preñado, ni tiene un deseo frustrado de ser madre que lo lleva a tener una conducta de futura mamá. Es por esta razón que, para esta condición se prefiere utilizar otros términos, como pseudogestación. Porque, sí, efectivamente, existe, aunque hay muchas ideas equivocadas sobre el tema. Desde HolaVet aclaramos las principales dudas sobre el tema, recordando que siempre, ante cualquier duda, conviene consultar con el veterinario, que sabrá dar un diagnóstico preciso según las características específicas de nuestra mascota.
¿Qué causa el embarazo psicológico?
Para empezar, hay que señalar que la pseudogestación no es una enfermedad, sino un desajuste hormonal, lo cual es un alivio, ¿verdad?
Pero, ¿Qué es lo que ocurre en las perras, que presentan síntomas de estar esperando cría, cuando no es así.
Ocurre que luego del período de celo, en el organismo de la perra se da un aumento de la hormona progesterona, haya quedado preñada o no. La secreción de esta hormona entra en declive progresivamente si la perra no quedó embarazada, y desciende abruptamente en las que han sido preñadas. En muchos casos el descenso de progesterona en perras no preñadas es más marcado que lo normal, y el cuerpo del animal comienza a generar prolactina (que estimula la producción de leche), como si hubiera quedado embarazada.
Cuando ocurre, este falso embarazo suele darse alrededor de un mes y medio después del período de celo. Por lo general, este síndrome dura entre 10 días y tres semanas y remite solo.
Aunque no existen estudios globales precisos, los expertos afirman que el embarazo psicológico lo padecen alrededor de 6 de cada 10 perras no esterilizadas.
¿Por qué ocurre este desorden en las perras?
Llama la atención que esta condición esté tan extendida. ¿Qué es lo que no funciona en la regulación fisiológica de las perras hembras, que lleva a que el embarazo psicológico sea tan común? Algunos biólogos consideran que la razón, en parte, puede ser simple supervivencia evolutiva. Los expertos han encontrado que en las manadas de lobos también es común la pseudogestación: Cuando una hembra ha tenido cría, otras hembras presentan síntomas similares. Esto favorece a la manada, ya que da más chances de supervivencia al cachorro, que tiene posibilidades de alimentarse con otras hembras, además de su madre, en caso necesario. Los perros domésticos habrían mantenido esta característica ancestral, aunque no cumpla con su función originaria.
Síntomas físicos y psicológicos
La pseudogestación se origina en cambios físicos, que promueven cambios en la conducta de la perra, que se orienta a un comportamiento más maternal.
Los principales cambios físicos observables son:
- Abdomen inflamado
- Crecimiento de las mamas
- Secreción de leche
Por otra parte, en cuando a la conducta, pueden verse algunos de los siguientes rasgos:
- Inquietud
- Rascado del suelo y conducta de anidación
- Pérdida del apetito
- Negativa a pasear
- Quejidos y languidez
- Ciertos objetos o juguetes son tratados como cachorros
Tratamiento y consejos sobre el embarazo psicológico en perras
Como la gripe, el falso embarazo “se va solo”; sin embargo, en algunos casos es necesario realizar un tratamiento o consulta veterinaria. Por ejemplo, cuando la secreción de leche es excesiva, lo que puede ocasionar mastitis (quistes en el tejido mamario); además, el animal es más propenso a padecer infecciones uterinas. También pueden ocurrir cambios en el carácter y la conducta que ameriten dar alguna medicación para bajar los niveles de ansiedad o agresividad.
Por último, aunque nuestra mascota no necesite ningún tratamiento veterinario, podemos hacer algunas cosas para que transite esta condición de la forma menos traumática posible. Algunos consejos de los expertos incluyen:
- Hacerle practicar más ejercicio que lo habitual
- Quitarle suavemente juguetes u objetos que podría “amadrinar”
- Evitar autoestimulación de las mamas por lamidas
- Evitar que beba agua en exceso
- Hacerle muchas caricias, ya que suelen estar algo decaídas
Por esta y otras varias razones, siempre lo más conveniente es esterilizar a nuestra mascota .
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