La pregunta no es ¿por qué los perros ladran tanto? Para eso y saber cómo solucionar este problema, podés leer nuestros 10 tips para que tu perro pare de ladrar. En este caso, la pregunta es: ¿por qué se desarrolló este modo de comunicación tan característico en el perro, que en muchas ocasiones desemboca en lo patológico y representa uno de los mayores problemas de comportamiento en el mejor amigo del hombre?
Se ha escrito mucho sobre el tema, pero, aunque parezca sorprendente, hubo muy pocos estudios científicos sobre los ladridos hasta comienzos de este siglo XXI.
Diversos estudios han comprobado que el ladrido es una forma de comunicación básica de los perros, y que puede transmitir desde ansiedad, agresión y territorialidad hasta ganas de jugar, pedido de atención, excitación y temor, sin contar conductas problemáticas, como aburrimiento, separación del amo o mala socialización.
Comprender cómo se originaron los ladridos ayuda a entender mejor a nuestra mascota, lo cual es un aporte a un mejor vínculo con esta y a su bienestar general.
Ladrar no es para los lobos
Ahora bien, ¿por qué los perros escogieron esta forma de vocalización, entre las muchas que son capaces de producir? Los ancestros de los perros, los lobos, ladran muy raramente. Según un estudio, menos del 3 % de las vocalizaciones de los lobos son ladridos, utilizados únicamente como alerta, defensa o protesta. Un dato puede acercarnos a la respuesta: los lobos ladran de cachorros, pero esa conducta desaparece en la adultez.
Según el etólogo Adam Byoko, de la Universidad Cornell (EE. UU.): “los perros exhiben muchos signos de neotonía (la retención de características juveniles en la adultez), que probablemente surgieron a partir de la domesticación. El ladrido es una de esas conductas juveniles de los lobos que los perros retienen en la adultez”. Otras características presentes en los lobos cachorros, que preservan los perros adultos, incluyen cabezas grandes, orejas caídas y hocicos cortos.
Podríamos decir que los perros, más que lobos domesticados, son cachorros de lobos domesticados.
Funciones del ladrido
Se cree que, en el proceso de domesticación del perro, la capacidad de ladrar se haya escogido como una conducta favorable, ya que funciona como un primitivo sistema de alarma.
Los científicos consideran que, a lo largo de los siglos, el ladrido habría ampliado su lenguaje más allá de la simple advertencia de un intruso al territorio del perro. Se piensa que se expandió como una forma de atraer la atención de los humanos y de socializar con otros perros.
Algunos, incluso, han postulado que el ladrido es una forma de imitar el lenguaje humano.
Por supuesto, no solamente hay diferentes ladridos para cumplir funciones diversas, sino que cada raza ladra de maneras y con frecuencias diferentes. De hecho, algunos perros prácticamente no ladran, desde el salvaje dingo australiano hasta razas como el basenji (de origen africano) y los chow-chow y shar pei (de China). También se ha observado que la mayoría de los perros callejeros no ladran o lo hacen muy poco. Aunque no hay estudios concluyentes sobre el tema, una teoría afirma que ladrar llamaría la atención sobre el perro y le ocasionaría problemas, ya sea de maltrato o de recogida por parte de autoridades sanitarias.
Ladrido: más complejo de lo que creíamos
Diversos experimentos llevados a cabo en 2008 en el Departamento de Etología de la Universidad de Budapest demostraron que los perros son capaces de diferenciar tipos de ladridos según el contexto, a partir de la frecuencia, el tono y el ritmo de los ladridos. Incluso son capaces de distinguir perros individuales a partir del ladrido. Todo esto es un indicio de que el ladrido no solo sirve para comunicarse con los humanos, sino que también sirve como una herramienta de comunicación entre los propios perros.
Es mucho lo que queda por saber en general sobre la conducta del mejor amigo del hombre, y sobre los ladridos en particular. Lo que sí sabemos es que ladrar es un comportamiento más complejo de lo que podría parecer a primera vista. Es nuestra obligación, como amantes de los perros, tratar de conocerlos mejor y aprender los matices de este lenguaje, para que sea una verdadera forma de comunicación, y no una conducta patológica molesta para el entorno y dañina para el propio perro. HolaVet pone a tu disposición un abanico de herramientas para asegurar el bienestar de tu mascota. Si tenés dudas sobre el comportamiento de tu mascota, podés hacer consultas online las 24 horas, y también te ofrecemos orientación telefónica en adiestramiento.
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